Tarta de Santiago fácil
Es cierto que para la repostería en muchas ocasiones hay que tener mucha mano y que no todas las elaboraciones en este campo no salen todo lo bien que quisiéramos, pero para ello está la práctica, para ir mejorando nuestras habilidades.
Para la receta de la tarta de Santiago que os traemos en esta entrada no necesitaréis ser unos auténticos expertos en repostería porque es una tarta muy sencilla de hacer.
Para su elaboración necesitaréis estos ingredientes:
- 250 gramos de almendras tostadas y sin piel.
- 220 gramos de azúcar refinada.
- 6 huevos (yemas y claras por separado)
- La ralladura de una naranja y un limón.
- Media cucharadita de café de canela en polvo.
- Mantequilla derretida.
- Azúcar glas (al gusto)
Modo de elaboración
Lo primero que debemos hacer es precalentar el horno a 180 grados, lo que nos facilitará meter la masa justo cuando acabemos de hacerla, así todo irá mucho más rápido.
Con la mantequilla en pomada y con la ayuda de una lengua de cocina o mismamente con la mano limpia, engrasaremos un molde desmontable circular de unos 20 o 25 centímetros de diámetro.
El siguiente paso es colocar la ralladura de limón, las almendras y la cucharadita de canela en el procesador de alimentos o robot de cocina y triturarlo todo hasta que quede un polvo bastante fino.
En un bol grande incorporaremos las seis yemas de huevo y el azúcar y lo batiremos todo hasta conseguir una masa espesa y con color pálido, pero es importante que tenga cierta consistencia espesa.
Una vez conseguido añadiremos el contenido del robot de cocina y mezclaremos suavemente sin parar hasta que todos los ingredientes estén bien ligados entre sí.
Por otro lado batiremos en un bol las claras de huevo con un poco de azúcar hasta que estén a punto de nieve. Iremos incorporándolo al bol con las yemas de nuevo e iremos mezclando poco a poco para que todos los ingredientes se integren bien entre sí.
Verteremos la mezcla en el molde que tenemos engrasado y la meteremos en el horno durante unos 40 minutos hasta que la parte superior esté dorada. Mientras se hace, podemos buscar en Internet la cruz de Santiago, la imprimimos, la recortamos y la reservaremos.
Cuando la tarta esté hecha la sacaremos y dejaremos que enfríe por completo, momento en el que la desmoldaremos, pondremos en un plato grande, colocaremos la cruz de papel en el medio y espolvorearemos el azúcar glas con un colador. Retiraremos la cruz y ya estará lista para comer.
Consejos
Cuando vertamos la masa en el molde, es aconsejable moverla circularmente y darle un par de golpes en una de las esquinas del molde, con esto haremos desaparecer cualquier burbuja de aire que haya podido quedar en la masa y quedará toda correctamente distribuida.